Si bien, lamentablemente, ya queda poco resquicio para el asombro, los productores rurales entrerrianos sentimos por estas horas que el Gobierno Provincial no sólo no escucha nuestros reclamos, sino que directamente, toma nuestras necesidades en tono de burla.

Mientras los caminos rurales están cada vez peor (¡que lejos estamos de que sean verdaderos caminos de la producción!) y el Gobierno entrerriano se encamina a terminar su mandato dejando la trama vial aún en peor estado de la recibida de la gestión anterior, por estos días nos enteramos por distintos medios de prensa de cuestiones que provocan desazón e impotencia.
Resulta que mientras la Dirección Provincial de Vialidad (DPV) alega no tener recurso alguno para cubrir necesidades mínimas, un vehículo oficial de esa repartición fue sorprendido haciendo uso particular en un recital de rock, puntualmente de Paul McCartney. Asimismo, indigna del mismo modo las fotografías que retratan a un camión de la DPV trabajando en el armado del acto político partidario del gobernador Bordet. Paralelamente, han surgido informaciones que dan cuenta que se estaría por realizar un número importante de nombramientos en el sector administrativo provincial, acumulando militantes políticos en la previa de la elecciones, hecho que lejos de redundar en un beneficio para Entre Ríos, se transforma en un nuevo elemento que aumentará la burocracia, el rojo en las cuentas públicas y la ineficiencia.

Mientras, los habitantes de la Entre Ríos profunda, sus maestros, los trabajadores rurales y de la salud, junto a los productores agropecuarios, hacemos malabares para continuar con nuestras actividades, rogando para no quedar aislados, aunque en muchos casos resulta imposible evitarlo debido al abandono y la precariedad de los caminos.
No es justa, la postergación y hasta el olvido que sufren los entrerrianos que no viven en lo centros urbanos más importantes. No es entendible, ni aceptable, que los productores que son actores protagónicos del desarrollo, del empleo y de la economía entrerriana, vivan a diario semejante vía crucis para ir a trabajar o sacar la producción.

Ante este panorama desolador de los caminos rurales, que contrasta fuertemente con estos hechos de público conocimiento que dan cuenta de los excesos y el despilfarro del Estado, es que las entidades enroladas en la Mesa de Enlace de Entre Ríos, reclamamos las aclaraciones sobre los hechos expuestos y exigimos las sanciones administrativas y judiciales para los responsables.