La Federación de Asociaciones Rurales de Entre Ríos (FARER) desea manifestar su beneplácito ante la decisión de la titular del Tribunal de Juicio y Apelaciones de Paraná, Carolina Castagno, quien ordenó el desalojo de la estancia Casa Nueva -usurpada hace algunos días-, hecho que la magistrada catalogó como un accionar “inconsulto y clandestino”.
De este modo, la Justicia revoca de manera clara, contundente y eficaz, un fallo insólito y arbitrario del juez subrogante de La Paz, Raúl Flores, sentando un precedente firme y esclarecedor que lleva tranquilidad a la sociedad entrerriana que había visto vulnerados derechos consagrados en la Constitución Nacional.
Si bien ha sido la Justicia quien ha establecido como una usurpación los hechos de público conocimiento, a la vez que ha ordenado el desalojo de las tierras, entendemos que en este proceso ha sido determinante la movilización encarada por FARER, otras entidades rurales, autoconvocados, productores y vecinos, quienes decidieron salir en defensa del derecho de propiedad desde el primer momento.
La expresión y manifestación pública de los sectores mencionados han sido decisivos para que se diera prontamente luz a esta situación anómala y con evidentes intenciones políticas que llevó zozobra durante días a los entrerrianos, quienes veían como grupos de personas llegaban a la provincia a ocupar tierras invocando ambigüedades ideológicas en claro desprecio por la ley y la paz social.
En síntesis, este fallo brinda tranquilidad y confianza, y termina siendo un antídoto importante ante el preocupante silencio de los gobiernos provincial y nacional, quienes se negaron en todo momento a condenar los hechos delictuales acaecidos, generando un clima de marcada incertidumbre en productores y vecinos.